Miraflores,
28 de abril del 2017
Señor.
Cesar
Hildebrant:
En
el semanario de su dirección de fecha viernes 21 del presente mes y año,
aparece publicada en la caratula (página 1), bajo el titulo: ¡La pista de Alan García!,
una oprobiosa difusión que ataca el honor
y la reputación del expresidente Alan García Pérez, lodo infame que no
solamente agravia al exmandatario sino a su madre, hijos y demás familiares,
círculos sociales y políticos donde el goza de un gran aprecio.
Claro que a periodistas como ustedes
eso no les interesa. En los interiores de su conciencia estarán las verdaderas
razones de su conducta.
Entiendo
que la propagación de la noticias
agraviante tiene como finalidad, a la par del dolo, el desprestigio, la
destrucción política, incentivar el odio contra el agraviado, engañar a la
opinión pública, confundir a la población, pervertir a la juventud, buscar el
aplauso de los antiapristas, que seguramente lo agasajan con elogios hipócritas
,y también abismar a los intonsos.
Si
bien el inciso 4 del artículo 2º de la Constitución Política del Perú garantiza
las libertades de información, opinión, expresión y difusión del pensamiento
mediante la palabra oral o escrita o la imagen por cualquier medio de
comunicación social sin previa autorización ni censura ni impedimento alguno,
bajo responsabilidad de la ley, también es cierto que un periodista decente,
para difundir una nota como esta, tiene que haber realizado una verdadera contrastación,
lo que en el caso de esta publicación no ha ocurrido y no podría ocurrir jamás
porque la infamia publicada es inexacta y totalmente falsa.
Le
exigimos a usted señor del semanario “Hildebrant en sus Trece”, se sirva disponer
la publicación de esta rectificación en la misma primera pagina que ha sido
difundido el agravio, lo que usted está obligado a cumplir de conformidad a los
previsto en el inciso 7,del artículo 2º de nuestra Carta Magna que, a la letra
en su primer párrafo dice:”Toda persona tiene derecho: Al honor y a la buena reputación,
a la intimidad personal y familiar así como a la voz y a la imagen propia”.
Segundo
párrafo:”Toda persona afectada por informaciones inexactas o agraviada en
cualquier medio de comunicación social tiene derecho a que se rectifique en
forma gratuita, inmediata y proporcional sin perjuicio de la responsabilidad de
la ley”.
Esta
misiva que se la dirijo a usted señor Hildebrant es en mi condición de abogado
defensor del Dr. Alan Gabriel Ludwig García Pérez (lo que es público y notorio),
el cual se encuentra fuera del territorio nacional, y es el anticipo a una
denuncia penal por difamación que en los próximos días se interpondrá, de
conformidad a lo dispuesto por el articulo 132º, tercer párrafo, del Código
Penal.
Atentamente
Genaro
Vélez Castro
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