* Cree que se requiere una nueva ley que, tal como ocurrió en el 2014 con Sunedu, impulse la obligatoriedad del proceso liderado por el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa.
* “La ley es incompleta. Tiene que complementarse con
otra que establezca el tránsito hacia la acreditación institucional”.
* “Tenemos vinculación cercana con gremios de
universidades privadas y públicas, y todos coinciden en la acreditación”.
* Lezcano recuerda que el CNE emitió opinión técnica antes
de que se apruebe la ley de licenciamiento permanente, pero los congresistas
omitieron lo referente a la acreditación.
Hace un mes, el Ejecutivo promulgo la ley que establece
el Licenciamiento permanente de las universidades (Ley 32105). Aunque
la normo no incluyo las recomendaciones técnicas del Consejo Nacional de
Educación (CNE), su presidente considera que la forma para garantizar la
calidad universitaria es avanzar hacia la acreditación institucional.
¿Qué cambia con la Ley 32105 para calidad universitaria?
En todos los sistemas educativos del mundo es
indispensable la evaluación para los estudiantes, los docentes y la
institución.
En universidades, esa evaluación se garantiza con la
acreditación, que es un proceso en el que se crean estándares, no condiciones
básicas para funcionar como lo es el licenciamiento.
Esos estándares pasan por un proceso de autoevaluación y
de evaluación por pares, realizada por evaluadores registrados en agencias
acreditadoras nacionales e internacionales. Eso es calidad. Se asocio a la
Sunedu con la calidad educativa, pero eso se garantiza con la acreditación.
El licenciamiento era necesario por la situación del
sistema antes del 2014, pero ahora hace falta la acreditación.
¿Por qué no se incluyó la acreditación en la nueva Ley?
Creo, en el buen sentido de la palabra, que hubo
ignorancia de parte de los que trabajaron esa ley. La importancia de la
acreditación no la conocen en detalle y por tanto convirtieron el
licenciamiento temporal en permanente y establecieron algunas herramientas para
fiscalización y supervisión que ya existían, pero eso no es suficiente para la
calidad educativa.
Debe mejorar con otra de ley para que sea obligatoria.
¿Cómo garantizar que, mientras avanza la acreditación,
las universidades, mantengan Las condiciones básicas?
La Sunedu sigue fiscalizando, debe hacerlo, en la última
ley se dan algunas herramientas para poder fiscalizar, pero se omite toda
referencia a la acreditación. Nos preocupan las universidades públicas.
Muchas obtuvieron licencias con observaciones, no es que
pasaron la valla limpia. Esas observaciones aún no se superan, hay temas por
resolver. Lo que nos preocupa son los proyectos de ley respecto a las
universidades denegadas porque esas no pudieron ni siquiera pasar por las
condiciones mínimas.
Menciono que las universidades deben autoevaluarse ¿Cómo
aseguramos que esa autoevaluación cumpla su función?
Somos un sistema universitario todavía inmaduro, pero no
somos el de antes del 2014.Ya no hablamos del riesgo de las universidades que
salieron del sistema y podían caer en autoevaluaciones pobres.
Estamos hablando de universidades con condiciones básicas de calidad. Podríamos cuestionar que hay alguna que se filtró, pero el sistema se saneó. La autoevaluación va tener una mirada diferente, más seria, algunas mejores que otras, pero no concluye con la autoevaluación, la garantía está en la evaluación por pares.
Luis Lezcano Sáenz - Pdte. Consejo Nac. Educación |
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