De acuerdo con la directora General de Defensa del
Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura, Leslie Urteaga, son diversos los
sitios y zonas arqueológicas que enfrentan algún tipo de riesgo: en Chulucanas,
Piura, el Cerro Ñañañique por una posible invasión.
En Puno, el Complejo Arqueológico de Pukara, también por
posibles invasiones y afectaciones al patrimonio; y en el Callao, la zona
arqueológica Huaca Culebras por una invasión.
La funcionaria informó que ante cualquier incidente que
involucre el patrimonio cultural, la población puede hacer las denuncias
correspondientes ante el sector Cultura.
Detalló, además, que dañar zonas arqueológicas o monumentos,
así como comercializar bienes culturales, está penado por Ley. Las multas son
hasta de 1,000 Unidades Impositivas Tributarias.
En tanto, el Código Penal prevé las siguientes penas: seis
años de prisión efectiva por atentados contra monumentos arqueológicos; y ocho
años de prisión efectiva por destrucción, alteración, extracción y
comercialización.
Si en este tipo de actos participan funcionarios o
servidores públicos, la sanción puede llegar a 10 años de prisión efectiva. Si
este tipo de trabajadores omite sus deberes o facilitan la comisión de delitos
contra el Patrimonio Cultural, pueden recibir hasta 6 años de prisión efectiva.
Se informó que, durante el 2017, se han impuesto multas por
afectación al patrimonio por más de un millón de soles.
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