Advierte que hay “mucha
presión” sobre el Tribunal Constitucional, así como una “campaña mediática” para mantener a
Keiko Fujimori en la cárcel.
Está próxima la decisión del Tribunal Constitucional (TC)
sobre el caso de Keiko Fujimori, y se dice que el antecedente de Ollanta Humala
es favorable para ella. ¿Coincide con ese análisis?
(Expreso) Jurídicamente, el TC tiene que determinar si la señora Keiko
Fujimori ha realizado o no lo que los fiscales alegan, como obstrucción a la
justicia, puesto que es evidente que los aportes de campaña, en el momento en
el cual los recibió, que creo que fue en el año 2011, no constituyen ningún
delito. El TC tiene que determinar si corresponde la pena de prisión
preventiva, pero ahora por un plazo de 18 meses.
El Tribunal tiene que hacer un examen exhaustivo de la
situación, no detenerse únicamente en el número de meses, como ha hecho la
Corte Suprema, tiene que determinar si es que hay causas para poder mantener a
la lideresa de Fuerza Popular detenida.
¿Por qué cree que la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema solo se detuvo en analizar si el plazo de la prisión preventiva debía ser reducido?
El sistema judicial está muy golpeado por la política. El
caso de los audios de ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’ ha servido para inhibir
y amilanar a todo el sistema de justicia nacional. Los jueces y fiscales que no
forman parte de la cúpula que está manejando o filtrando esta información se
sienten amenazados.
En términos claros, la justicia en el Perú está mediatizada
por la política. Hay mucha presión política, porque los jueces ni el Poder
Judicial están hechos para resolver las cuestiones de derecho a la luz de los
reflectores públicos, como si fueran políticos.
Entonces, ¿es
irregular que el resultado de esa casación haya sido reducir el plazo?
La finalidad de la casación no es la reducción de nada. La
razón de ser de cualquier casación es detectar en el proceso un vicio procesal
y romper el fallo de la instancia inferior, es decir, anularlo. Entonces, no se
limita al número de meses, sino que también va al fondo de todo el proceso que
se ha seguido.
Lo que pasa es que hay estas ONG, congresistas y políticos
castro-chavistas y caviares, que justamente buscan crear un ambiente de
controversia política, alrededor de los magistrados que tienen que resolver
sobre estos asuntos.
Entonces, los magistrados se sienten amilanados, porque
tienen miedo de que si fallan contra lo que la presión mediática y política que
estos sectores quiere, podrían ser perseguidos, o acusados de haber
parcializado su voto.
Desde el Congreso se está cuestionando al actual TC en
algunos medios, pues habría una aparente decisión a favor de Keiko Fujimori, y
algunos congresistas no quieren elegir al nuevo TC, porque alegan que
favorecerían a la representante de Fuerza Popular.
Hay mucha presión política sobre el Tribunal, para que firme
lo que ha dicho la Corte Suprema, hay una verdadera campaña mediática para
mantener a la lideresa de Fuerza Popular en la cárcel. Quieren amilanar al TC,
alegando que el voto ya estaría decidido, [pero] es imposible que el voto esté
decidido porque aún no ha tenido lugar la audiencia, hay que escuchar en la
audiencia el alegato del Ministerio Público, y de la abogada de la señora
Fujimori.
Es imposible conocer cuál va a ser el voto del Tribunal
Constitucional sobre la prisión de Keiko Fujimori. El TC está compuesto por
abogados, por magistrados de distintas posiciones políticas, no se puede decir
que está digitado políticamente.
GOLPE DE ESTADO
¿Hay sectores que
pretenden generar inestabilidad política?
Hay la intención deliberada, política, ideológica de llevar
al Perú hacia un golpe de Estado, quieren la disolución del Congreso. Ahora
resulta que tampoco les gusta el TC en funciones, y hacen especulaciones sin
ningún fundamento porque es imposible conocer cuál será el voto sobre la
prisión de Keiko.
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