Ruidíaz es el reemplazante natural de Guerrero, quien fue
suspendido provisionalmente 30 días por la FIFA, y sobre sus hombros caerá todo
el ataque peruano en Wellignton, donde la selección nacional tiene su primera
cita con la historia que lo llevaría al Mundial Rusia 2018.
La "pulga", como se le conoce por su manera rápida
de picar el balón, tiene cualidades distintas que Guerrero, pero posee la misma
agresividad para pisar el área y eso lo demostró con goles en la Liga de
Mexico, donde es idolatrado por ser una pieza clave en el Monarcas Morelia.
En el club mexicano, Ruidíaz vive uno de sus mejores
momentos. Desde que llegó, en junio del 2016, su importancia se la ganó con
goles y eso se deja ver que en su primera temporada anotó once tantos y fue
elegido como el goleador del certamen.
En el 2017 la historia no cambiaría. Todo lo contrario, su
importancia llegó a la cima porque sus goles ayudaron a su club a mantenerse en
la Primera División en México.
Nadie olvida que un partido definitorio ante Monterrey, su
gol, a los 91 minutos, salvó al Monarcas de descender, situación que lo llevo a
ser el jugador más querido por la afición de ese club.
Justamente en esa temporada, el 15 de julio, fue
galardonado en la gala que se celebró en
Los Ángeles con tres balones de oro de la Liga MX: como mejor jugador, mejor
delantero y máximo goleador.
Crecimiento deportivo
Pero el olfato goleador de Raúl Ruidíaz no es recién, eso ya
se observaba desde cuando hizo su debut en Primera División con la camiseta de
Universitario de Deportes en el 2009, temporada que coincidió con el título
nacional de los cremas.
Sus buenas actuaciones lo hicieron emigrar a la Universidad
de Chile, donde también fue protagonista y obtuvo el título Apertura del fútbol
chileno.
Ese mismo año fue trasferido al Coritiba de Brasil, equipo
con el duraría sólo seis meses para pegar la vuelta al club que lo vio nacer en el fútbol: Universitario.
En el 2013 volvió a levantar otro título con el conjunto
"merengue" y se quedó hasta el 2015. Posteriormente fichó por el FBC
Melgar por seis meses para regresar a su "casa" crema.
Raúl Ruidíaz necesitaba volver a la élite y consolidarse
como un descollante delantero en el ámbito internacional y eso lo logró cuando fue convocado a por el técnico Ricardo
Gareca a la Copa América Centenario, que se jugó en Estados Unidos.
Ese certamen continental de selecciones Ruidíaz catapultó al
delantero y lo volvió a poner en vitrina por sus actuaciones y por su gol del
triunfo ante Brasil. Este resultado fue catalogado como histórico por luego de
41 años Perú le ganaba a una selección brasileña en una Copa América y 31 años
en cotejos internacionales.
Estas actuaciones lo llevaron a fichar por el Monarcas
Morelia, club en el que es ídolo. También ayudó para que el técnico Gareca lo
tenga en cuenta como pieza clave en su esquema de juego para las eliminatorias
al Mundial de Rusia 2018.
Desde entonces se
convirtió en la pieza de cambio ideal de Paolo Guerrero, porque cuando no
estaba el goleador histórico, Raúl Ruidíaz asumía ese rol con altura y nunca
desentonó tal como se espera ante Nueva Zelanda en Wellignton.
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